Hay muchas parejas que están pensando en tener un hijo o en adoptar, pero que les cuesta tomar la decisión por miedo a lo desconocido. Para este tipo de parejas indecisas ha nacido un nuevo servicio de renting de bebés.
El renting de bebés es una especie de alquiler, un paso previo a la adopción durante el cual las parejas pueden probar la experiencia de ser padres, incluso conocer a la criatura y valorar si unos y otros están preparados para una convivencia más prolongada. En el caso de ser así, tras 6 meses de renting los padres pueden optar por adoptar al bebé o por devolverlo.
Los responsables del proyecto confían en que este sistema servirá para impulsar las adopciones, al facilitar el primer paso, y también a formar familias más sólidas, ya que si las cosas no funcionan, existe la posibilidad de marcha atrás.
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