martes, 21 de octubre de 2008

Los científicos que consiguieron ratones fosforescentes, implantan el gen GPF a perros guardianes

El mismo equipo de investigadores que el año pasado sorprendiera a la comunidad científica y la opinión pública, creando ratones de laboratorio fosforescentes, ha dado un importante paso que abre las puertas de una aplicación práctica de este descubrimiento.

El equipo ha implantado el mismo un gen GPF (green fluorescent protein) obtenido de una medusa, a 11 perros de raza rottweiler y ha conseguido unos animales perfectos para labores de vigilancia nocturna, que ya están trabajando para una fabrica de prendas de neopreno, en las afueras de Chicago.

La fosforescencia que emiten los perros facilita la labor de los vigilantes humanos, que ya no tienen que ocupar sus manos con linternas, y además sirven como elemento disuasor para los delincuentes

Diferentes representantes de empresas de seguridad han mostrado su interés por estos perros y puede que en breve el paisaje nocturno de nuestros polígonos sea mucho más colorido.

1 comentario:

Anónimo dijo...

bueno yo no creo que existan los ratones fosforescentes, ni aun mutando sus genes